PTY –
Tocumen Internacional / Ciudad de Panamá / Domingo, 7:45am
“Pasaporte
por favor”, me pide una chica muy simpática en la entrada de la fila y yo
enredado con la mochila, la chaqueta, el iPad y las dos maletas pues no daba
pie con bola. Es que venía a todo echar
cuento con la agente especial “Torna” (pues claro q es su nombre clave q no me
voy a poner a divulgar los nombres de todos mis contactos pues) que venía a
despedirse antes de q partiera yo a mi nueva misión. “Solo el pasaporte”,
repitió la joven al ver q yo intentaba sacar más de un documento de la mochila.
Hoy estaba yo un poco desorientado xq era la primera vez q me tocaba viajar
casi mientras el viaje se armaba. No es
para tanto pero a mí el drama se me viene muy bien para ponerle sazón a la
historia.
El
viernes había yo recibido un correo electrónico del Cuartel General diciéndome
q mi vuelo salía el domingo en la mañana (un día antes de lo q yo había
calculado). El mensaje venía con dos
archivos adjuntos que no se autodestruirían después de 10 segundos y en los
cuales venia mi información de vuelo y la carta que justificaría mi entrada al
país donde mi Supervisor me encontraría.
Yo revisé la información de vuelo y confirmé asistencia, sin fijarme que
el archivo donde venía la carta estaba vacío.
El sábado en la tarde me fui a casa del Agente Especial “Complikeited” a
tejer un poco y tratando de imprimir los documentos de viaje fue cuando me di
cuenta que faltaba la dichosa carta.
Inmediatamente reporté el fallo al Cuartel General, pero siendo fin de
semana pues no había mucho q hacer. La
decisión fue q yo haría el viaje y ellos me irían mandando la información a
medida iba llegando a los aeropuertos. “Si
tienes algún problema dales nuestro número y q nos llamen a Italia”, leía el
último mensaje de correo.
“Motivo
del Viaje?”, preguntó el Oficial de Fronteras con una sonrisa completa… y yo
pensaba, “Xq xuxa tienen q ser tan guapos siempre? Seguro es un plan
gubernamental para sacarle información a los Agentes Secretos q viajamos de
incognito”, seguro es eso. “Trabajo”,
respondí tratando de mirarlo solo a los ojos y cruzando los dedos para q no me
pidiera la carta… “oh, barco… interesante”… “pues sí, entre otras cosas”… “listo,
q disfrute su viaje”… y con eso partí rumbo a recoger las putas maletas que ya
deberían estar esperando en el carrusel y deseando tener 15minutos más para
conversar con el guapo agente.
Tramites
terminados, me dirigí al Gate a esperar el siguiente vuelo y a comprar un cable
de repuesto para cargar mi iPad, ya q muy hábilmente dejé el mío en casa… nada
más y nada menos q el cable del único dispositivo q tenia para recibir la puta
carta y donde estaba toda mi información de vuelo… es q te digo q esto de
Agente Secreto se me da pues de mil maravillas.
Recargado ya el dispositivo de comunicación inalámbrica, me dedique a
revisar mis mensajes de correos y con grata satisfacción vi como mis supervisores
habían mandado exitosamente el documento q me garantizaría la entrada al
siguiente puerto… Ahora ya podía descansar y disfrutar de mi vuelo al otro lado
del mundo…
Después de una incoherente retahíla en algún
idioma q supuse era Alemán, la voz con fuerte acento del capitán nos dio la
bienvenida a la Ciudad de Múnich, nos agradeció por elegir la línea aérea y nos
advirtió q en referencia al clima el cielo estaba despejado y estábamos
levemente sobre el punto de congelación.
Y este servidor en jeans y camiseta… es que si vas de misión al
Mediterráneo, pues no piensas (cosa q me salto a menudo) q necesitarás más q
pantalones de lino blanco y sweaters a rayas azules, digo yo… “Ni modo, espero
q en el Gate no haga tanto frio” pensaba yo, pero para mi sorpresa la puerta q
se abría era la de la cola del avión… En Modo cubito de hielo… por alto tráfico
de aeropuerto, teníamos q bajarnos en medio de la pista donde una caravana de
buses nos esperaba para llevarnos a la Terminal… pu... pu… pu… puputa mamadre…
me cago en el tra… tra… tra-tra… tráfico aeroportuario…
Y disfrazado de paleta de frutas tropicales
bajé la escalera del avión en mi mejor interpretación de Lady Di y crucé la
pista hasta llegar al dichoso bus.
Una vez en la terminal las cosas mejoraron un
poco en lo q refería a temperatura corporal y después de una corta fila de
migración, un hermoso (casi de afiche) oficial alemán me pedía los documentos
de entrada… y yo sintiéndome muy moderno y europeo pues le entregaba mi iPad
con la información requerida… tanta modernidad haría a Julio Verne muy orgulloso
de mí. Después de una ligera plática, el
susodicho me regresó el iPad y salía yo de vuelta a la búsqueda del siguiente
Gate… tenia escasamente 40minutos antes de abordar el siguiente avión y por
supuesto me perdí en el aeropuerto. No
me mires así q yo no tengo la culpa q la puerta B62 este en un piso inferior
entre la B42 y la 43… q eso no tiene sentido…
Pues después de caminar ida y vuelta la
terminal completa (y no exagero) llegué al punto de salida justo para el
abordaje… y por andar con el apuro por estar contra el tiempo pues no me fije
por donde iba… y al entregar el boarding pass a la chica de la pañoleta en el
cuello, crucé la puerta sin más y antes de q pudiera decir “duro de coco” me
encontraba yo otra vez afuera del edificio, en quinta de ballet, en el puto
frio y a la espera de un bus q me llevaría de vuelta a la pista a tomar el
avión.
El vuelo fue MARAVILLOSO… cielos despejados,
nubes perfectamente blancas contra un infinito fondo azul turquesa… naturaleza
perfecta al extremo. Y allí estaba yo,
sobrevolando los Alpes en un pequeño avión bimotor, suficientemente arriba de
las nubes como para tener una vista perfecta de los picos nevados y aun así
poder distinguir los poblados en las faldas de las montañas… por momentos me
pareció ver a lo lejos la figurita de una diminuta monja saltando y cantando
alegremente… no pudiera ser más perfecto aunque fuese en blanco y negro.
El camino al Astillero fue de novela rosa… la
carretera va por la costa y vas entre curvas y bajadas rodeando acantilados y
cruzando túneles tallados en la montaña, a tu izquierda el mar cargado de
veleros y pequeñas embarcaciones y el sol refleja en el agua enviando destellos
q acentúan la textura rocosa del paisaje. Cinematografía pura, en 3D y con olor
a agua de mar.
En el Astillero mi supervisor me esperaba ya…
hicimos los tramites de registro y nos dispusimos a recorrer el proyecto que
comenzó hacía ya un mes y en el cual estaríamos un mes más… 200+ millones de
dólares invertidos en la renovación de uno de nuestros barcos… esto será épico.